El Melon&Watermelon Event de Bayer de este año ha pivotado en torno al concepto de moda con una charla en la que expertos de toda la cadena han analizado los retos que tiene por delante el sector agro y la distribución
Fruittoday- Si hay una palabra que se repita últimamente en todos los foros y medios de comunicación (quitando inflación y deflación), esa es, sin duda, ‘sostenibilidad’. Un término que, de tan manido, puede sonar a entelequia o greenwashing, pero en el que muchas empresas con valores firmes se afanan, poniendo en acto medidas concretas.
Es el caso de Bayer, que este año ha retomado de forma presencial su Melon&Watermelon Event, para abordar la sostenibilidad a todos los niveles. Y no es un decir. La sostenibilidad fue el hilo conductor de cada una de las ponencias, pero también del resto de acciones que llevó a cabo la compañía. Desde las visitas al campo demostrativo, donde se aplicaron prácticas culturales sostenibles como el uso de fauna auxiliar, sensores para control de riego y rotación de cultivos con uso de leguminosas, en este caso habas, con un triple objetivo: fijar el nitrógeno ambiental, reduciendo el uso de fertilizantes nitrogenados; incorporación de habas como abono en verde; y reducción del aporte de nitratos y, por ende, menos contaminación de los acuíferos. Hasta la post-charla, ya que los responsables de Bayer anunciaron que, para compensar la huella de carbono, habían decidido plantar un árbol por cada asistente al evento -un centenar-, aplicando el criterio de sostenibilidad de forma concreta también en este aspecto.
Preservar para las nuevas generaciones
Juan Francisco Martínez, Trade Partnership Manager en Bayer CropScience Vegetablee Seeds inauguró la jornada lanzando una pregunta a los ponentes: ¿Qué es la sostenibilidad?
Cristiane Lourenço, Bayer Global Sustainability Director, lo sintetizó en una palabra clave: ‘preservar’. Proteger lo que ya tenemos para, como dijo en la primera mesa redonda José Antonio Canovas, gerente de Kernel Export, “producir en simbiosis con el entorno, respetándolo de modo que las futuras generaciones puedan seguir, a su vez, produciendo”.
En este sentido, Antonio Martínez Aroca, jefe de servicio de Formación y Transferencia Tecnológica de la Dirección General de Agricultura de la Consejería de Murcia, fue claro: “nuestra actividad no debe hipotecar el futuro de los que vienen. Debemos conseguir que nuestra huella sea nula”.
Retail, doctrina estética y nuevos modelos asiáticos
Una de las charlas más esperadas fue la de Laureano Turienzo, presidente de la Asociación Española del Retail (AER), que fue contundente al aseverar que “no podemos desperdiciar frutas y hortalizas por la doctrina de la estética. Hay que hacer autocrítica para progresar”.
El desperdicio de alimentos es un problema de todos los eslabones de la cadena de valor a nivel global, dijo Turienzo, quien contó algunas de las acciones que se están llevando a cabo distintos países en materia de reducción del desperdicio alimentario, como Walmart (socio de la AER a pesar de no tener tiendas en nuestro país), y medianos y grandes establecimientos de la distribución en Francia. “Desde el punto de vista técnico apuestan por manejar mejor el stock. En segundo lugar, donan producto o excedente a asociaciones. Y en menor medida tratan de concienciar o educar al consumidor”, un aspecto que, según Turienzo, debería tener mayor protagonismo, porque en los hogares es donde más desperdicio se genera.
Habló también Turienzo de los nuevos modelos de distribución que se están implementando en los países asiáticos, con ejemplos de peso como China, donde el modelo de venta ya ha cambiado: “Pinduoduo aglutina a 16 millones de agricultores que venden a través de la plataforma de este gigante. Han recibido 61.000 millones de pedidos”.
Otro caso de éxito es Alibaba y su cadena de supermercados omnicanal Hema Supermarket que ha creado una línea de negocio con un modelo direct-to-consumer. Su comunicación no puede ser más directa: a través de las nuevas tecnologías, realizan live streaming (sesiones en directo) desde el campo, ‘acercando’ el producto al consumidor.
¿Consumidor sostenible?
En la segunda mesa redonda, ‘Sostenibilidad más allá del campo’, el director gerente de Proexport, Fernando Gómez, comentó que “se está poniendo entre la espada y la pared al sector agrícola por un problema que se ha ido creando durante varias generaciones. Hoy tenemos la agricultura más sostenible de la historia”.
Por su parte, Mireya Rifá, CEO de Eco-45, vicepresidenta de la Asociación de Especialistas en Prevención y Salud Laboral (Aepsal) y miembro de la junta del European Network of Safety and Health Professional Organizations (ENSHPO), recordó que “La sostenibilidad es un cambio de paradigma. Tenemos que ir en bloque. El 80% de los consumidores derivan la responsabilidad de la sostenibilidad a las empresas porque no quieren asumir el coste (…) El campo no sabe comunicar bien lo que hace, y el retail tiene parte de culpa en ello”.
Fernando Gómez lo puso de relieve al contrastar las cifras de facturación entre dos realidades distintas: “La empresa agrícola más grande de Murcia factura 200 millones de euros, mientras que Edeka factura 60.000 millones. Desde el campo no podemos comunicar solos. Hay que cambiar para entendernos y que crezca la confianza entre productor y distribución”, concluyó.
Kernel: “Hay que dejar las líneas de trabajo que no suman”
El gerente de Kernel Export, José Antonio Canovas, explicó que la filosofía de trabajo de su empresa radica en una agricultura cada vez más verde (fueron pioneros en incorporar una planta de biometanización para convertir desechos agrícolas en energía) y con “programaciones más realistas” (en Kernel, entre el 80-90% de los volúmenes se trabajan con programas). Y fue claro y conciso al asegurar que “hay que abrir los ojos y dejar las líneas de negocio que no suman (…) ser valientes y dejar a las cadenas que no suman ni aportan valor al agricultor”.
Sobre este mismo punto habló en la mesa redonda Fernando Gómez, director gerente de Proexport: “Con la coyuntura actual el productor está entendiendo que menos es más. No puede permitir que su producto se quede en el campo”.
En Kernel apuestan por variedades con resistencias que permiten minimizar el uso de fitosanitarios como las de Bayer, una empresa que, como explicó José Antonio Canovas, destaca por su enfoque de proximidad con el agricultor. “Es un punto muy fuerte. Gracias a ellos hemos conseguido un Galia que nos permite tener cultivos viables, con buen rendimiento, comer, conservación…”.
Orange Candy, ejemplo de sostenibilidad
La propia directora de sostenibilidad de Bayer, Cristiane Lourenço, dio ejemplos de cómo las variedades de la marca Seminis aumentan el rendimiento y reducen las pérdidas en campo. Como la nueva variedad dentro del paraguas Orange Candy (SVMA 6558), que incrementa un 13% el rendimiento/ha y minimiza en un 19% las pérdidas en campo. O el tomate Ansal, que […]