La lluvia ha llegado en su peor momento para los productores de hoja, que son los que están registrando mayores pérdidas a causa de las inundaciones registradas en el Sureste español: variedades de lechuga, espinaca y minihojas son las más afectadas. Otras producciones, como la alcachofa, han recibido con benevolencia las lluvias de estos días y productos como el brócoli, coliflor y calabacín se verán afectados por el exceso de humedad.
Concretamente, los productores del Campo de Cartagena son los más perjudicados por las inundaciones que desde el pasado jueves se han producido en la Región de Murcia. Los técnicos de las empresas asociadas a Proexport están aún evaluando los daños ocasionados por las lluvias en sus producciones y, aunque es pronto para avanzar cifras hasta que puedan entrar a los campos en estos momentos anegados, ya se han señalado las primeras pérdidas.
“Aún es pronto para evaluar daños pero la zona del Campo de Cartagena es la más perjudicada. Si primero se ha cebado con ella la sequía, ahora son las inundaciones las que están dañando el campo”, afirma el presidente de Proexport, Juan Marín, quien añade que en cambio, en el Valle de Guadalentín las lluvias han beneficiado a productos como la alcachofa.
Para lechuga, espinaca y otras variedades de hoja, la campaña de Navidad se ha truncado, ya que desde el jueves no pueden recolectar por las lluvias. “Se van a perder un 50% de las producciones de lechuga y sus variedades que iban a recolectarse para las fiestas de Navidad”, explica el presidente de la Sectorial de Lechuga Iceberg de Proexport, Javier Soto. Desde el pasado jueves no se ha podido entrar a recolectar y hasta el jueves será imposible acceder a los campos.
Por su parte, el presidente de la Sectorial de Hortalizas Varias, José Antonio Cánovas, indica que se ha perdido gran parte de la producción de espinaca y minihojas: “Las producciones de tres o cuatro semanas en el Campo de Cartagena se han perdido por las inundaciones”.
Por otro lado, el presidente de la Sectorial de Alhóndigas, Mariano Zapata, explica que parte del pimiento que estaba recién trasplantado en los invernaderos de la zona también se ha perdido o bien las plantas están muy dañadas. A la espera de poder evaluar detalladamente las pérdidas en torno a un 25% de las plantas se han perdido y habrá que replantar.
Para próximos trasplantes, no se podrán realizar debido a que las fincas están inundadas o húmedas en exceso, lo que impedirá abordar los programas tal y como estaban previstos en los próximos meses.
En cuanto a calidad, se prevén pudriciones por el exceso de humedad y botritis, así como productos de hoja con tierra.
Junto a los daños en las producciones, invernaderos arrasados por escorrentías, caminos y pasos cortados que impiden acceder a las explotaciones, desbordamiento y rotura de embalses y mallas son algunas de las consecuencias que este temporal ha ocasionado en las infraestructuras agrícolas.