La producción de tomate en España con destino a la exportación se concentra en zonas
geográficas muy concretas que presentan condiciones climáticas lo más cercanas posible a las idóneas para el cultivo de esta planta.
El cultivo de tomate no es exclusivo de estas zonas, pero sí lo es prácticamente el del
denominado “tomate de invierno” o tomate de fuera de temporada y que representa el mayor
porcentaje del tomate destinado a la exportación, y además se concentra en los meses de invierno y primavera.